El tribunal otorgó la pena de cumplimiento efectivo al policía retirado que, hace dos años, mató al joven frente al bingo de Adrogué. La familia se mostró en conformidad con la resolución judicial. Adelantaron que buscarán llevarlo a un juicio civil.
El ex policía Mario Correa fue declarado culpable y condenado a 32 años de prisión efectiva por el asesinato de Mauro Silva, ocurrido el 2 de julio de 2013. La pena corresponde a los delitos de “Homicidio simple” y “tentativa de homicidio”, debido a que en la misma ocasión fue gravemente herido el hermano del joven fallecido, Renzo Silva.
Los abogados de la querella, María Laura Táccari e Ismael Jalil, habían solicitado la prisión perpetua, pedido que fue respaldado por el fiscal Sebastián Scalera del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Lomas de Zamora. Si bien los magistrados aplicaron el máximo de la pena prevista en el Código Penal para ambos delitos, no tuvieron en cuenta los agravantes de "alevosía y ser miembro de una fuerza de seguridad", ya que en el momento del crimen se encontraba en retiro activo en el Comando de Prevención Comunitaria (CPC) de Ezeiza.
"No quisieron dejar asentado que era policía, es una cuestión de política judicial. Hay una responsabilidad que encubren porque no quieren reconocer que la inseguridad también está vinculada con los policías", sostuvo Jalil.
El tribunal, compuesto por los jueces Rafael Emilio Villamayor, Jorge Omar Camino y Marcelo Delaturre, no permitió ingresar la lectura de la sentencia a varios familiares y organismos que los acompañaron para evitar incidentes. Por ese motivo, había cierto temor a que hubiera un fallo favorable al imputado.
“Estamos muy conformes aunque no le dieron cadena perpetua. Estaban juzgando a un policía y pensábamos que tal vez tenían piedad por eso, pero esta vez Dios nos escuchó a nosotros”, expresó ante www.deBrown.com.ar Celia, madre de la víctima.
Ahora, mientras se aguarda la posibilidad de que la defensa apele la resolución judicial, desde el entorno de Mauro adelantaron que buscarán que el ex efectivo policial sea llevado a un juicio civil.
“Estamos muy aliviados con esto, pero ahora queremos que lo juzguen porque además, dejó a una criatura sin su padre”, agregó la mujer.
El crimen
El episodio en que Mauro perdió la vid ocurrió crimen ocurrió la noche del 2 de julio de 2013, a las 21.15, en la puerta del bingo de Adrogué. Él y su hermano Mauro Silva cenaban en el bar Pancho Bahía, situado frente a la casa de juegos, cuando vieron que en plena vía pública un hombre golpeaba a su pareja, identificada como Liliana Luna.
Ambos jóvenes intentaron detener el ataque a golpes de Correa hacia su esposa. Como respuesta, el hombre extrajo un arma de una bolsa y les disparó a los dos: Mauro falleció inmediatamente y Renzo fue trasladado a un hospital herido de gravedad.
Luego de lo que hizo, el agresor volvió a ingresar al bingo para perderse entre la multitud. Allí dentro, fue detenido cuando un policía vio que se le cayó la pistola 9 milímetros Bersa Thunder de una bolsa naranja que llevaba en un bolsillo de su campera.