Cansado de la inacción judicial, un padre salió en búsqueda de respuestas y obtuvo el nombre del delincuente. Se trata del crimen del colectivero Andrés Vedoya, quien en junio de 2013 recibió un balazo en el cuello mientras realizaba su recorrido. Tras el impacto, el hombre perdió el control del transporte y originó una tragedia. Embistió a otro rodado, que a su vez atropelló y mató a un cartonero y a su caballo.
Desesperado porque la causa judicial para dar con el asesino de su hijo no registraba avances, comenzó a indagar por su propia cuenta y llegó al nombre del presunto sospechoso del crimen. El caso ocurrió el 11 de junio de 2013, en Rafael Calzada. Andres Vedoya, padre de cuatro hijos, conducía un interno de la línea 271 y, sorpresivamente, recibió un balazo en el cuello, que le hizo perder el conocimiento de inmediato.
El chofer chocó contra un colectivo de la 514, que estaba detenido delante de él; y éste a su vez, por el fuerte impulso, atropelló y mató a un cartonero y a su caballo, que cruzaban la avenida San Martín, en su intersección con la calle Balboa.
Vedoya falleció pocos días después y la investigación en la Justicia avanzó poco y nada. Según afirma su familia, a finales de este año la causa podría ser archivada por falta de información al respecto. Por este motivo, su padre, comenzó a realizar averiguaciones y asegura tener el nombre del sospechado que realizó el disparo que originó la tragedia.
El objetivo es poder seguir recolectando pistas que sirvan para hacer justicia, ya que el día del accidente más de 30 personas viajaban en el colectivo que conducía la víctima; y unos diez pasajeros más, estaban a bordo del otro transporte que participó del accidente. Todos testigos presenciales que podrían aportar datos concretos a la investigación.
El caso fue investigado por el personal de la comisaría 5ta. de Rafael Calzada y quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción 18 del Departamento Judicial de Tribunales de Lomas de Zamora.
