La pequeña de cinco años, que el 16 de junio recibió un trasplante de médula ósea, volvió a su hogar tras 45 días de internación. Ahora, tres veces por semana debe realizarse controles y aplicarse antibióticos en el hospital Garrahan, donde llevó adelante su tratamiento. Su recuperación total, depende del transcurso del tiempo.
Después de un mes y medio, los médicos le dieron el alta a Jazmín. La niña oriunda de José Mármol está con su familia luego de haberse sometido al trasplante de médula ósea que precisaba para seguir adelante.
La intervención fue el 16 de junio, después de casi ocho meses desde que le diagnosticaron leucemia. Todo el tratamiento se llevó a cabo en el centro de salud pediátrico de la capital porteña, donde estuvo internada hasta la semana pasada.
“Jaz está bien, la médula está funcionando bien, produce lo que tiene que producir. Hay que darle tiempo, los primeros días son clave, recién vamos por la mitad”, señaló a www.deBrown.com.ar Vanina Geloz, su tía.
Ahora, tendrá que ir tres veces por semana, para que le realicen controles y también para que le administren una serie de antibióticos. Sin embargo, “no es nada preocupante”, sino que se trata de procedimientos normales para seguir avanzando hacía su recuperación.
Más allá de los temas específicos de la salud, contaron que a la nena aún le cuesta “volver al ritmo habitual y al trato social”. No obstante, remarcaron que es una reacción esperable consecuencia de la dura situación por la que atravesó. Por eso, su adaptación depende solamente “cuestión de tiempo”.
“De cierta forma, está tratando de reinsertarse socialmente. Los médicos nos explicaron que es lógico que después de tanto tiempo de encierro, de estar internada, tenga actitudes que no son propias de ella”, agregó y remarcó que todo su entorno está abocado a que su sobrina “mejore su ánimo”.
La noticia de la aparición del donante -que trajo un gran alivio a la familia y generó mucha felicidad- se conoció el 30 de mayo, y se supo que el perfil genético que coincidió pertenecía a “una persona del exterior que ratificó su voluntad de donar”. Desde ese entonces la alegría colmó a la familia y las ansias fueron en aumento.
Esa novedad tan esperada los impulsó a seguir adelante con la campaña que habían iniciado para dar con el “alma gemela” de Jazmín y también para fomentar la donación del tejido que ella requería.
Siempre en compañía del banco de sangre del Garrahan y del INCUCAI, llevaron a cabo cuatro jornadas de donación e inscripción al registro nacional de médula ósea. La última fue el 18 de julio, fecha en que decenas de personas se acercaron al Colegio de Gestores de Lomas de Zamora para sumarse a la causa.
Quienes deseen más información, pueden comunicarse con los familiares a través de la página de Facebook: “Fuerza Jazmín”, donde encontrarán los datos de las actividades que se llevan a cabo como parte de esta tarea solidaria que ayuda a salvar vidas.
