En total, son 18 los empleados que estaban bajo contrato y ahora serán parte del staff fijo de la compañía. Es una paso en la resolución del conflicto que había generado paros y movilizaciones. Ahora, se deberá definir si el depósito de Burzaco cierra finalmente sus puestas y se realiza el traslado a la planta de Longchamps.
Tras varios meses de conflicto, la empresa La Serenísima acordó incorporar en forma permanente a 18 trabajadores del depósito de Burzaco. La decisión se tomó luego de una reunión que mantuvieron los directivos de la empresa con la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA). Asimismo, pusieron en suspenso el traslado a la planta de Longchamps.
Se trata de personal que había ingresado por medio de agencias de trabajo. Pasados los meses de prueba, correspondía que fueran efectivizados, pero hasta el momento esto no se había llevado a cabo y era uno de los reclamos sindicales por los cuales iba a realizarse un paro, que finalmente se suspendió tras el fallecimiento de Pascual Mastellone, fundador de la compañía.
Tras una reunión llevada a cabo la semana pasada, se acordó que en el plazo de 60 días los trabajadores contratados queden efectivos, manteniendo la antigüedad desde el ingreso a dicho puesto. A la vez, se les sumó una categoría, que tendrá retroactivo a dos meses anteriores.
En relación al traslado del depósito de Burzaco a Longchamps, todavía no hubo novedades aunque el plazo de vencimiento previsto para el 31 de octubre ya está cerca. Según adelantaron desde ATILRA, en las próximas semanas los empresarios estudiarán varias propuestas que el Sindicato elaboró sobre cómo optimizar el funcionamiento del lugar para que no sean necesarios los cambios.
Al respecto, el temor residía en que si bien La Serenísima había asegurado que los 137 puestos de trabajo de quienes se desempeñan en el centro logístico temían que esto no ocurriera a raíz de que todavía no estaba resuelta la situación de varios trabajadores. Además, corrían algunos rumores de que los empleos no se conservaran bajo las mismas condiciones.
Lejos de las tensiones que llevaron a distintas medidas de fuerza desde iniciado el problema, hace más de seis meses, ahora las negociaciones comenzaron a darse en forma “fluida”, por lo que las expectativas sindicales mejoraron notoriamente, y antes de fin de mes podría haber novedades respecto a este tema.
