Los vecinos de Almirante Brown recordaron al arquitecto Adolfo Estrada, al cumplirse 100 años de su nacimiento. El que fuera vecino del partido, tuvo ascendencia tanto en el gobierno comunal como en el nacional.
En "La Porfia", lugar en el cual Estrada aventuró gran parte de su vida y hoy se presenta como la sede del Tribunal municipal de faltas, esta semana se llevó a cabo la ceremonia.
Entre los presentes que albergaba el lugar se encontraba la títular de la sede tribunal, Vanina Ledezma y amigos junto a familiares del arquitecto.
En nombre del gobierno municipal, Ledezma agradeció poder participar de tan emotivo acto dedicado a un personaje que es parte de la historia de Almirante Brown y, a continuación, acompañada de familiares presentes descubrió una placa en honor a Estrada.
Además, no faltaron las palabras sentidas que hicieron emocionar al auditorio que colmó los jardines del Tribunal. Juan Agustín, hijo del homenajeado, hizo una breve reseña de la trayectoria profesional y pública de su padre mientras su nieto, Sebastián, recordó las anécdotas que vivió junto a su abuelo en la casona de Rosales 1280.
Para terminar, Manuel, otro de los hijos de Adolfo, agradeció la presencia de familiares, amigos y “el acompañamiento cariñoso” del gobierno municipal para realizar este homenaje a su padre y destacó los cuidados y el mantenimiento del municipio para preservar la casona donde funciona el Tribunal de Faltas.
Adolfo Juan Estrada quedó en la historia como un destacado vecino de Brown y funcionario del gobierno nacional y municipal. En el año 1945 se instaló en Adrogué en la ya nombrada casona, "La Porfia".
Durante la presidencia de Juan Domingo Perón fue designado como Secretario de Obras Públicas del municipio y, desde ese cargo, elaboró el Código de Edificación de Almirante Brown, priorizando los espacios verdes e inspirado en importantes ciudades del mundo.
Asimismo, colaboró con la Subsecretaría de Informaciones de la Presidencia de la Nación difundiendo la obra del gobierno peronista a través de diferentes exposiciones; tuvo a su cargo la elaboración de la capilla ardiente donde se velaron los restos de María Eva Duarte de Perón y, por iniciativa de su amigo Benito Quinquela Martin, realizó el Paseo “Caminito” de La Boca.
Durante el tercer gobierno peronista, el municipio volvió a requerir los servicios de Estrada como secretario de Obras Públicas, quien ejerció como intendente interino tras el golpe de estado que puso fin al gobierno de Isabel Perón.
Al final de su vida, Estrada fue designado por la Asociación del Fútbol Argentino como asesor en la selección de las sedes del Mundial ’78. Falleció el 24 de marzo de 1979, durante la ejecución de su obra póstuma, el edificio anexo de la Casa Central del Banco Provincia en la Ciudad de Buenos Aires.