Por la décimo primera fecha del torneo de Primera D, el “Tambero” no jugó bien y cayó 2-0 ante el “Naranja”. No estuvo cómodo dentro del campo y lo pagó caro. Brandon y Ríos marcaron los goles.
El conjunto dirigido por Héctor Baillié venía de dos victorias consecutivas y soñaba con una tercera en Lugano. Jugó poco y recibió dos golpes por parte del local.
La primera mitad comenzó de la peor manera para los del Sur. No se mostraron precisos y a los 15’ ya se encontraban con un tanto en contra. Tras un centro y una floja reacción del arquero, la redonda le quedó servida a Brandon para que sólo tenga que empujarla al gol. Claypole no pudo demostrar todo lo bueno que había realizado en los duelos anteriores y no tuvo reacción.
Le costó controlar el juego. La idea que tiene de hacerse con la pelota, para tocar por el medio y hacer participar a los laterales pasando al ataque, no se vio y fue uno de los factores por los que no pudieron generar peligro en todo el partido. Los locales se concentraron en ganar el mediocampo, como clave para un buen final.
La última etapa no varió demasiado. Claypole intentó, pero no encontró nada. Perdían rápidamente el balón antes de llegar al área, porque se la quitaban o por errores propios. Tanto fue así que no pusieron en aprietos en ningún momento al arquero Lugano.
Cuando el partido se moría, la “Naranja” pudo cerrarlo. Tras un remate desde larga distancia, la pelota se estalló en el travesaño y, en el rebote, Ríos no hizo más que acariciarla para estampar el definitivo 2-0 con el que se fue el encuentro.
Flojo partido del “Tambero” que no pudo aprovecharlo para seguir descontando puntos en la pelea por la permanencia en la categoría. Seguramente el “Loco” ya está analizando todo lo que le dejó este duelo, para poder revertir la situación ante Alem, en el Capocasa.
