El Colegio de Nutricionistas de la Provincia brindó una serie de recomendaciones. Los detalles.
La llegada del frío es una invitación al consumo de comidas altas en calorías que aumentan la temperatura corporal. Además, complica la regularidad en la actividad física, incorporar alimentos frescos, vegetales y frutas y la hidratación.
En este marco, desde el Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Buenos Aires recalcaron la importancia de tener presente que los requerimientos energéticos no se modifican con la estación del año. Realizaron por ello una serie de recomendaciones para mantenerse saludable.
La licenciada en nutrición Josefina Locatelli detalló que lo fundamental es incorporar a diario comidas "de todos los grupos”. Tales como son los vegetales, cereales, frutas, legumbres, carnes, leche, quesos, aceites, semillas y frutos secos.
“Nuestro cuerpo obtiene energía de los alimentos para cumplir con sus funciones vitales y requiere del aporte de una variedad de nutrientes para la mantención de un buen estado de salud”, afirmó.
Por la fibra, agua, vitaminas y minerales, es muy importante ingerir frutas y vegetales en diversas formas. Pueden consumirse en sopas, budines, al horno, revueltos, en puré, tortillas o guisos con legumbres y carnes con poca grasa.
Para una alimentación saludable y equilibrada se deben incluir preparaciones completas. Estas tiene que aportar carbohidratos, proteínas, grasas y fibra, prefiriendo productos de estación. Así, se refuerza el sistema inmunológico y ayuda a combatir el frío.
Vegetales: acelga, batata, brócoli, calabaza, cebolla de verdeo, espinaca, hinojo, puerro, rábano, remolacha, zanahoria y zapallo, entre otros.
Frutas: pomelo, naranja, mandarina, manzana, pera y kiwi.
Las legumbres son una buena opción para esta época del año, considerando su alto valor nutricional y su versatilidad a la hora de incluirlas en diferentes preparaciones. Por ejemplo, los porotos, lentejas, arvejas y soja son algunas de las más conocidas y pueden sumarse en guisados, croquetas, milanesas, hamburguesas o ensaladas, por ejemplo.
Otro punto a tener en cuenta a diario es la hidratación, ya que por las bajas temperaturas puede costar más la ingesta de líquidos.
“Realizar regularmente actividad física nos mantendrá en movimiento mejorando nuestra temperatura corporal, además de la contribución a tener una buena salud ósea y muscular”, aseguró Locatelli. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda, al menos, hacer ejercicio durante media hora al día.