El Gobierno informó que en abril las facturas de más de 250 pesos pagarán entre 300 y 500% más. El defensor del pueblo bonaerense, denunció que la gente “no puede soportar más subas”.
En la audiencia pública del viernes se confirmó que el servicio trepará un 13 por ciento desde el mes que viene y se actualizará al menos dos veces más. Asociaciones que protegen a los usuarios cuestionaron la medida.
El encuentro se desarrolló en el Teatro porteño de la Ribera con más de 100 expositores. En él, el ministro de Energía, Juan José Aranguren, comunicó que habrá topes y que la ampliación se repartirá entre abril, octubre y abril de 2018.
Los consumidores con boletas superiores a 250 pesos, afrontarán alzas de entre 300 y 500 por ciento, según la categoría. No obstante, en promedio las familias pagarán un 13 por ciento más.
Los domicilios de la categoría R1-R23 tendrán un máximo de incremento del 300 por ciento; los R31-R33 de 350 por ciento; los R-34, de 400 por ciento; y para los del tipo SGP el techo de los incrementos será del 500 por ciento.
Según comunicó el funcionario desde el 1° de abril, habrá una reducción “gradual y previsible” del subsidio de gas en un 5 por ciento en todo el país. Y, se mantendrán las bonificaciones para aquellos que consuman menos que el año anterior.
Por su parte el defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Guido Lorenzino juzgó que la población “no puede soportar más aumentos”. “El gobierno propone negociaciones salariales del 18 por ciento, en cuatro tramos y aumentos del 300 por ciento”, se quejó.
Recalcó que el servicio que brindan las distribuidoras es cada vez “más malo y caro”. “Se quiere compensar en 15 meses lo que no se hizo en 10 años”, reveló.
Por último, requirió a la administración nacional que aplique un “criterio de racionabilidad y sentido común” para definir un cuadro tarifario gradual.