Con críticas y cuestionamientos, el Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, arribó al distrito junto a la vicejefa María Eugenia Vidal; y el intendente de Vicente López, Jorge Macri. El objetivo fue comenzar a instalar sus eventuales precandidatos en el territorio bonaerense.
Se trató de la primera parada de campaña del PRO en el conurbano bonaerense, la cual llegó con críticas al gobernador Daniel Scioli; y a los referentes del Frente Renovador en el distrito. La recorrida inició en Claypole, con una mesa de exposición y diálogo con los vecinos. Luego, los dirigentes visitaron el Hogar de Niños Ruca Malen, de la Asociación Civil Mensajeros de Paz, en Longchamps.
La actividad fue un claro intento de posicionar a los posibles candidatos de las próximas elecciones en la provincia de Buenos Aires. “Queremos mostrar un grupo de gente nueva con capacidad de gestión, con el compromiso de hacer”, aseguró Macri ante la prensa local.
Durante su discurso, el Jefe de Gobierno porteño recordó que “la Provincia invierte fortunas en publicidad”, cuando “ese dinero debería estar destinado a solucionar los problemas reales de los vecinos”. Y agregó: “Lo que le cambia la vida a la gente son las obras, no la sanata. Hay palabras que suenan lindas, pero no sirven para nada”.
En este marco, erigió a sus compañeros de gestión como “una alternativa para el cambio”. “Buenos Aires necesita una renovación con dirigentes como Vidal y Jorge Macri, que son parte de la nueva política. Hace 30 años que gobiernan los mismos”, opinó.
Sobre el final, luego de intercambiar preguntas y respuestas con algunos vecinos de Don Orione y Altos del Castillo, Macri se dirigió a los presentes y expresó: “Lo más importante es que crean en ustedes mismos. Si creen, no les van a entregar u futuro a los mismos de siempre”.
De la actividad también participaron el ministro de Hacienda porteño y referente macrista en la tercera sección electoral, Néstor Grindetti; el legislador Federico Salvai; y el presidente del Ente de Turismo porteño , Fernando De Andreis. En cuanto al ámbito local, la actividad fue coordinada por la ex concejal Miriam Niveyro, quien compartió la mesa con Macri. Además, participaron el saliente edil, Santiago Perón y otros referentes distritales.
Cruces
“Me parece buena la idea de regalarle un GPS (a los macristas) cada vez que cruzan la (avenida) General Paz”, señaló el jefe de bloque de Diputados del Frente Renovador, Darío Giustozzi, en relación a la visita proselitista de Mauricio Macri en Almirante Brown. Asimismo, respaldó los dichos del intendente interino y su sucesor en el cargo, Daniel Bolettieri. Pidió “prestarle atención a sus dichos respecto del recuerdo que hay de Macri por todas las fallas y lo que no hicieron en el barrio Don Orione”.
“Le ofrezco a Macri y Vidal un GPS a cada uno para salir de la Capital”, había expresado Bolettieri, previamente al arribo del Jefe de Gobierno porteño. “Tenemos temor que al cruzar la General Paz se pierdan y en especial para que lleguen a Don Orione, donde la empresa de los Macri hizo un negociado con la dictadura militar y se olvidaron de construir un polideportivo, un anfiteatro, la segunda etapa de la planta de tratamiento cloacal y la comisaría. Dejaron unidades sin terminar, con numerosas deficiencias técnicas y de proyecto, derivadas de la especulación financiera”, añadió.
En su discurso, el líder del Pro aprovechó la ocasión para responderle secamente al mandatario municipal y sostuvo: "Un GPS siempre es útil, para ellos les puede servir para hacer buena política".
Bolettieri, en tanto, cuestionó el recorrido en vistas de las próximas elecciones y expresó: “A lo mejor piensa que los vecinos nos olvidamos, debería pedir perdón antes de venir a hacer campaña, es una verdadera vergüenza”.
