Es ante el fracaso de la última paritaria entre el sector y los funcionarios de la gobernadora María Eugenia Vidal, quienes ofertaron un pago no remunerativo, de entre 800 y 2000 pesos, a cuenta del incremento que se defina. Se descontarán los días de paro.
Con el objetivo de asegurar el inicio de clases, el ministerio de Trabajo impuso la medida. En las próximas horas, se sabrá si la huelga nacional decretada por CTERA para lunes y martes seguirá vigente.
La disposición obliga a las partes a sentarse a negociar, retrotrayendo la situación al momento inmediato del comienzo del conflicto. Compromete a los dirigentes a concurrir a una nueva convocatoria el 8 de marzo y al resto de los educadores a arrancar el ciclo lectivo el lunes 6.
La oferta de la Gobernación supone un reembolso por única vez de 800 pesos para los maestros que cobran hasta 15 mil pesos; de 1200 pesos para los de entre 15 y 20 mil pesos; 1.600 pesos para quienes perciben entre 20 y 30 mil y; de 2.000 pesos para los que recaudan más de ese valor.
El ministro de Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro aseveró que si los docentes deciden no asistir a sus lugares de trabajo les descontarán de sus haberes un promedio de 650 pesos. Y, que cada día perdido deberá ser recuperado durante el receso invernal.
En la tarde de este viernes, en Congreso los sindicatos enrolados en CTERA, como Suteba y FEB, resolverán si continúan con el plan de lucha previsto.