Tras un prolongado viaje, Regazzoni arribó al distrito junto a la Ministra de Desarrollo Social Carolina Stanley y sin el acompañamiento del espacio local. Por su parte, los concejales realizaron caminatas sin disimular las diferencias que genera la candidatura y la forma de hacer política del ex titular del PAMI.
La candidatura a concejal de Carlos Regazzoni fue, casi junto con su separación del PAMI, el principio de un malestar que pronto se convirtió en interna pese a los intentos de su propio espacio político por ocultarlo. Su postulación genera incomodidad tanto fuera como dentro de Cambiemos. Durante su desempeño como funcionario nacional muchos no tardaron en criticar su ausencia. Sumado a esto, hoy recorre Almirante Brown sin el acompañamiento de sus pares y generalmente junto a la maquinaria del Gobierno Nacional.
Así sucedió el último jueves, durante una visita a Glew, que él mismo encabezó junto a la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley; y la Directora Nacional de Juventud, Camila Crescimbeni, después de permanecer ausente varias semanas por un viaje al exterior.
En su ausencia, la concejal Miriam Niveyro y su par y Julio Arriete avanzaron con recorridas por los barrios. De cara a las elecciones, la legisladora ponderó a www.deBrown.com.ar la labor que llevan a cabo “día a día con los vecinos”. “Cambiemos tiene la impronta de que los funcionarios no tienen que estar atrás de un escritorio, por eso estamos expectantes”, añadió.
En declaraciones a medios regionales, la titular del bloque en el Concejo deliberante local, había manifestado: “Respetamos a Regazzoni pero necesitamos a alguien que viva el día a día de Brown” en referencia al armado de listas.
Cabe recordar que las primeras grietas se dieron con la UCR y un reclamo de apertura concreto por parte del titular del comité radical local, Guilermo Seggiaro que según entendió “nunca existieron en Almirante Brown y no se si Regazzoni es la persona indicada para afrontar esta elección”.Por entonces las declaraciones fueron minimizadas por ediles del espacio amarillo, como Patricia Bontempo, sin pensar que en el corto plazo serían parte de una nueva interna, pero esta vez puertas adentro del propio PRO.