Regresó en el triunfo de Independiente de Avellaneda ante Central Córdoba y convirtió un penal. El mediocampista de Adrogué se había lesionado hace cinco meses. ¿Qué le había pasado?
De "Tengo el alma destrozada" a "Fue amor y dedicación", así de cambiantes fueron los últimos cinco meses para Tomás Pozzo, una de las grandes joyas que tiene Independiente de Avellaneda. Es que el browniano estaba en su mejor momento cuando se rompió los ligamentos.
Sin embargo, luego de mucho esfuerzo y profesionalismo, el oriundo de Adrogué logró regresar al campo de juego antes de lo esperado. Sumó minutos en el triunfo del "Rojo" ante Central Córdoba por la Copa Argentina y se encargó de patear un penal en la definición desde los 12 pasos.
"Nunca imaginé volver tan rápido y en este escenario, pero tampoco dudé porque me preparé mañana y tarde todos los días para que las cosas hayan sido así. No fue casualidad, fue amor y dedicación. Agradezco a todos mis amigos , compañeros de la profesión, familia y especialmente al doctor Gustavo Ríos", publicó en sus redes.
Ocurrió en marzo, en uno de los entrenamientos del equipo que, en aquel momento, era dirigido por Stilitano. Tras algunos estudios de rigor, días más tarde confirmó que había sufrido la rotura de ligamentos cruzados anterior de la rodilla izquierda.
"Fue el día más triste en mi carrera como profesional, tengo el alma destrozada. Estaré lejos de lo que más amo en este mundo y dedico mi vida entera por un largo tiempo", posteó el mediocampista después de conocerse la noticia.
Si bien Independiente se metió en los octavos de la competencia más federal del país, no transita un buen presente a nivel torneo local. Se encuentra muy cerca de la zona de descenso y el descontento de los hinchas se hace notar. Si retoma su mejor versión, Pozzo podría ser fundamental en la recta final del año.
⚽️Pozzo se rompió los ligamentos: "Tengo el alma destrozada"👇#Adroguéhttps://t.co/DQJ2ni16VY
— Noticias De Brown (@debrownweb) March 17, 2023