El grupo de unas 30 familias que ocupan desde hace más de cuatro meses el predio de las calles Gorriti y Leroux, ignoraron el dictamen de la Justicia. Según informaron vecinos de la zona en diálogo con De Brown, luego de que se realizó el operativo policial, ocuparon nuevamente el terreno. Ayer venció el plazo para que se retiren.
Cuando todo parecía haber concluido de forma organizada y pacífica, volvieron a ocupar el predio. Durante el mediodía de ayer, efectivos de la policía local iniciaron el desalojo del grupo de personas que tomaba desde hace más de cuatro meses el terreno de las calles Gorriti y Leroux, en Rafael Calzada. La orden la había emitido la Justicia y tenía vigencia hasta la medianoche.
Si bien, en principio, no habían interpuesto resistencia a abandonar el predio y el operativo se había llevado a cabo con éxito, los ocupantes no se dieron por vencidos y regresaron al descampado que tomaron como propio desde principios de este año. La justificación: no tener viviendas, trabajo ni dinero para adquirir una vivienda.
Durante la tarde, cuando quedó una mínima guardia policial para evitar desmanes, volvieron al terreno e instalaron una vez más algunas carpas, chapas y maderas. Alegaron tener "derechos" y sostuvieron que la toma "es producto de la justicia social".
Con esta acción, los ocupantes desoyeron la orden judicial de abandonar las tierras que pertenecen a un privado. Ahora deberá esperarse una nueva medida por parte de las autoridades, ya que el plazo para que se retiren por sus propios medios venció la medianoche de ayer.
Los vecinos del lugar manifestaron en diálogo con www.deBrown.com.ar su decepción por lo sucedido y denunciaron que la toma está dirigida por personas ajenas al distrito y que tiene intereses más allá de conseguir un lugar para vivir. "Hay gente que llega con camionetas último modelo, que están con ellos y que les dicen que hacer. Esto está organizado", advirtió Marta una residente de la zona.
Desde el inicio de la ocupación, habían exigido que se liberara el predio y que, a su vez, se le hiciera cumplir al dueño los cuidados del terreno. Esto se debe a que desde hace tiempo el lugar estaba abandonado, tenía el pasto muy alto y había empezado a acumular basura.
Lo cierto es que después de casi 5 meses de toma todo indicaba que ayer se resolviera el conflicto, pero nuevamente la lucha continúa. Esta es la última toma que quedó de la serie de usurpaciones realizadas desde febrero hasta abril de este 2013. Las mismas se habían llevado a cabo en diversos terrenos privados del territorio browniano. Longchamps, Burzaco, y Claypole fueron las localidades eje del conflicto por aquel momento. Todas se solucionaron prontamente con el accionar de la Justicia y la mediación de la Comuna local.