En el marco del plan de emergencia de seguridad provincial, se puso en marcha el control que busca desalentar los robos cometidos con motos. La normativa obliga a “llevará adherido en letras y números reflectantes, y la identificación de dominio del motovehículo, sin que coincida con el color de fondo del casco”.
Como parte del plan de emergencia en seguridad pública declarada por el Gobierno bonaerense, se implementaron nuevas restricciones a la circulación en motocicleta. ¿el objetivo? disminuir la cantidad de robos cometidos por motochorros.
La norma, publicada hoy en el Boletín Oficial, ya genera controversia entre las personas que utilizan a diario este tipo de vehículos. La consideraron “ridícula”, ya que “identificarse con un chaleco no resolverá los problemas de inseguridad”.
Es que la administración de Daniel Scioli ordenó que aquellos que viajen en moto como acompañantes por el territorio bonaerense porten casco y chalecos reflectantes, en los cuales debe figurar el número de patente del vehículo.
Advirtieron que la omisión de este requisito es considerado como una “falta grave”, por lo que las autoridades podrán retener el vehículo y la licencia a los que no cumplan con la disposición.
Reglamentación
La resolución 224/14, en su anexo, indica que el casco reglamentario deberá “tener las condiciones mínimas de seguridad establecidas por la norma IRAM-AITA 3621 y llevará adherido en letras y números reflectantes, la identificación de dominio del motovehículo, sin que coincida con el color de fondo del casco”.
Las dimensiones de cada letra y número “será de tres centímetros (3 cm.) de alto, dos centímetros (2 cm.) de ancho y el ancho interno de cada letra y número de medio centímetro (0.5 cm)”. Las inscripciones deberán figurar en ambos lados del casco.
En relación al chaleco reflectario, se dispone que el color de fondo sea amarillo, amarillo arena o amarillo naranja y tendrá por lo menos dos bandas blancas reflectantes horizontales en la parte superior anterior y posterior de cinco centímetros (5 cm.) de ancho, con una separación entre ellas de catorce centímetros (14 cm).
Deberán tener como mínimo una retrorreflectividad de trescientas treinta candelas lux por metro cuadrado (330 cd/lx m2). En medio de esas tiras estarán impresos los números indentificatorios.
La dimensión mínima de cada letra y número será de diez centímetros (10 cm) de alto, seis centímetros (6 cm) de ancho y el ancho interno de cada letra y número de un centímetro y medio (1.5 cm), indica la resolución. El tamaño contará con un mínimo de sesenta centímetros (60 cm.) de largo y treinta y cinco centímetros (35 cm.) de ancho.
También se regulan los casos en los que el acompañante no tenga chaleco. “El acompañante deberá vestir prenda con bandas reflectantes o material combinado, que presente las propiedades técnicas de reflectividad y fluorescencia descriptas, además de llevar adherida o impresa en forma legible el dominio del vehículo”.
En caso de que haya perdido parcial o totalmente su visibilidad, el acompañante “deberá contar mínimamente con una banda de material combinado de cinco centímetros (5 cm.) o dos bandas de tres centímetros (3 cm.) de ancho”, con las mismas características previamente señaladas, con número de patente adosado.
“Podrá utilizarse de forma supletoria lo establecido en la Norma IRAM 3859, en cuanto a las condiciones técnicas mínimas referentes al chaleco reflectante, de no optar por utilizarse las estipuladas; no obstante ello, deberá llevarse adherido o impreso en forma legible el dominio del vehículo que conduce”, reza el texto.
