Las chicas dirigidas por Carlos Fernández ya trabajan enfocadas en el nuevo desafío llamado Primera D. El equipo deberá afrontar un cambio generacional en su plantel y además, antes del debut, disputará ocho encuentros amistosos.
Tras el ascenso obtenido el año pasado, el equipo femenino de hockey de San Albano comenzó los entrenamientos de cara al torneo de Primera D, que comenzará el 14 de marzo. El equipo tendrá más de un mes para ponerse a punto.
Los entrenamientos comenzaron a principio de febrero y continuarán durante todo el mes, con una frecuencia de tres veces por semana. La idea del cuerpo técnico es empezar con ejercicios puntuales de musculación, para luego ir subiendo la intensidad con el correr de los días.
La mayoría de los trabajos se realizan en la cancha y con pelota, tanto los físicos, como los tácticos. El entrenador realizará un acondicionamiento individual de cada jugadora, para luego ir trasladando los conceptos de manera global.
Además, San Albano ya tiene programados ocho encuentros amistosos antes de comenzar la competencia oficial. Estos se irán disputando a lo largo del mes durante los martes y los sábados. Los equipos a enfrentar son: San Cirano B, Regatas de Avellaneda B, Berazategui, Monte Grande, Temperley, Lomas B, Banfield B y Monte grande B.
El equipo deberá sobreponerse a la deserción de varias jugadoras importantes que lograron el ascenso el año pasado y como respuesta, el DT tiene planeado subir a jugadoras de la quinta para reforzar el plantel. Las chicas de Burzaco participarán en la zona D 2 y tendrán enfrente varios equipos de renombre, lo que alzará más la vara de su rendimiento.
Al ser consultado sobre los objetivos que traza para este año, Fernández proyectó: “Lo primero será mantener la categoría, no a cualquier manera, ni a cualquier costo. Debemos afianzarnos en esta nueva divisional y estar abiertos a la posibilidad de llegar lo más arriba que se pueda”.