El ataque cerebro vascular es una afección que puede ser fatal o causar secuelas físicas y mentales irreversibles. Es la segunda causa de muerte y la primera de discapacidad en adultos. En la Argentina, cada 4 minutos una persona lo sufre. Los especialistas recomiendan que "frente a las alarmas que manifiesta el cuerpo, hay que consultar al médico de cabecera".
El ataque cerebral, es una afección causada por la súbita pérdida de flujo sanguíneo en el cerebro producto de una trombosis, embolia o sangrado dentro de la cabeza por la rotura de un vaso sanguíneo. Cualquiera de las dos situaciones puede provocar que las neuronas se debiliten o mueran, ya que sin oxígeno las células nerviosas no pueden trabajar. Las partes del cuerpo controladas por las regiones del cerebro afectadas, consecuentemente, también dejan de funcionar.
Hoy se conmemora el Día Mundial del Ataque Cerebral, a fin de concientizar a toda la población sobre la importancia de realizar periódicas consultas médicas y, sobre todo, en caso de sentir alguna molestia. Almirante Brown se suma a esta actividad y se realizan trabajos especializados en los hospitales de distrito para reforzar los habituales controles de la salud.
Sintomas que deben ser tratados inmediatamente con un especialista:
· Debilidad o adormecimiento en un brazo, una pierna, o la mitad de la cara
· Confusión o dificultad para hablar o entender
· Problemas para ver con un ojo o ambos
· Pérdida del equilibrio o de coordinación
· Dolor de cabeza muy intenso
Acciones frente a un ataque:
Lo primero que se debe hacer es acostar a la persona con un almohadón o varias almohadas sobre uno de sus costados para evitar que la saliva se dirija a las vías respiratorias.
Inmediatamente debe llamar al servicio de emergencias aclarando al operador que la persona ha sufrido un ataque cerebral, lo que constituye una emergencia.
Mientras se espera la llegada de la ambulancia no se le debe proporcionar al paciente ningún tipo de medicación; a no ser que sea diabético y que la glucosa sea menor de 80 mg/dl, motivo por el cual debe suministrársele algún alimento o bebida con azúcar. Para ello la persona deberá estar perfectamente sentada, despierta y con el mentón lo más pegado al tórax posible.
Factores de riesgo:
El posibilidad de sufrir un ACV se duplica a partir de los 55 años de edad. Los hombres tienen mayor riesgo con respecto a las mujeres. Las personas con antecedentes familiares de enfermedad coronaria o cerebrovascular constituyen el grupo de mayor riesgo, lo mismo que quienes ya sufrieron un ataque cerebral. Todos estos son factores de riesgo no controlables; pero existen otro tipo de ellos que pueden ser controlados:
· La Hipertensión Arterial es el factor de riesgo más frecuente; está presente en casi el 80 por ciento de los pacientes que sufren un ataque cerebral en la Argentina.
· El control de la diabetes es esencial. En nuestro país el 22% de los pacientes que sufren un ataque cerebral es diabético.
· El consumo excesivo de alcohol tiene una estrecha relación con el riesgo de sufrir hemorragias cerebrales.
· El riesgo de sufrir un ataque cerebral aumenta entre un 50% y un 70% en fumadores, mientras que el impacto es mayor en mujeres.
· El colesterol aumenta el riesgo de que se tapen las arterias, incluidas las que van al cerebro.
Otros factores de riesgo que pueden ser controlados incluyen el sedentarismo, la obesidad y la drogadicción
Prevención:
El riesgo a sufrir ACV puede disminuirse a partir de algunos comportamientos saludables, a saber:
· Controles médicos regulares.
· Estricto control de la presión arterial
· Abandono del cigarrillo
· Dieta saludable
· Ejercicio físico bajo supervisión médica
· Control estricto de la diabetes
· Control y tratamiento de las enfermedades del corazón
