Las nenas y adolescentes víctimas se ubican entre los 11 y 18 años. Ellas duplican la cantidad de casos ocurridos en varones. A su vez, los números se cuadruplican cuando refiere a violencia sexual. En el entorno familiar se encuentran, en general, los responsables.
Estos datos fueron confirmados en un estudio elaborado por UNICEF, entidad internacional dedicada a la infancia; y la secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Nación. Las mujeres sufren hasta cuatro veces más violencia que los hombres.
Según señalaron, los padres concentran sus agresiones sobre los chicos más pequeños. Hasta los 10 años, los destinatarios de violencia son los nenes, pero entre los 11 y los 18, las niñas. Los culpables, en la mayoría de estos hechos, son del género masculino.
Para la investigación se tuvo en cuenta las 16.800 personas atendidas, entre 2006 y 2013, en la línea 137 del “Programa las Víctimas contra las Violencias en la Ciudad de Buenos Aires”. De ellas, 9.700 eran niños y jóvenes.
A su vez, detectaron 5.200 adultos agresores, que arrojó un 52 por ciento de nenas y chicas agredidas, por sobre el 48 por ciento de varones menores.
La violencia, se hace visible en diversas formas. La física en la que se incluye el daño físico, como golpes, patadas, rasguños, puñetazos y la emocional con insultos, gritos, frases de menosprecio y humillación, apodos, chantajes emocionales o amenazas.
La violencia económica, a partir del control de dinero o bienes de la víctima; la amenaza o retención de bienes y objetos; y hacia los niños se identifica con la rotura, ocultamiento o ausencia de sus bienes. Y la sexual, que perjudica en especial a las chicas, implica manoseos, acoso, violaciones, abuso sexual o informático con contenido pornográfico.
Un distrito sin violencia
Almirante Brown realiza cotidianamente acciones para tratar de resolver esta problemática que exige medidas urgentes. Brinda espacios de contención y de formación para las vecinas.
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