La oriunda de Claypole anotó dos goles en la fase final del certamen.
Luego de finalizar la primera ronda del torneo local en lo más alto, San Lorenzo de Almagro se aseguró un lugar en la Copa de Oro, donde debió enfrentar a los mejores ocho equipos de la temporada. Con la browniana Débora Molina, viajó a Mar del Plata y se quedó con el título 25 en futsal.
La oriunda de Claypole anotó un gol en el triunfo 9-0 ante SECLA por los cuartos. En tanto, volvió a marcar en semis frente a Racing, victoria 2-1 que sirvió para meterse en la gran final. En el duelo definitorio, superaron 3-2 a Sportivo Barracas y levantaron el trofeo.
"Mis sensaciones son muchas. Estoy más que feliz, tengo una emoción tan grande que no se puede explicar. El plantel tiene humildad, compromiso, compañerismo y amor por la camiseta. Siempre trabajamos para ser las mejores", sostuvo la representante local en diálogo con www.deBrown.com.ar.
Pisó una cancha por primera vez cuando apenas tenía seis años. Estrella Federal la ayudó a transitar por un camino lleno de goles. Después pasó a Lomas de Burzaco, club en el cual disputó los Juegos Bonaerenses. Más tarde, vistió los colores de Banfield y Arsenal de Sarandí.
En 2008, recaló en San Lorenzo, institución a la que pertenece hasta el momento tras 14 largos y exitosos años. En 2020, firmó contrato profesional y se convirtió en la primera browniana en conseguir este logro.