Se cumple un nuevo aniversario de la dolorosa partida del jugador de San Martín de Burzaco. El joven había chocado la cabeza con la tribuna durante el partido, y falleció 11 días después.
El reloj marcaba los 44 minutos del primer tiempo, cuando Emanuel recibió un pase forzado de su compañero, el cual quiso salvar que se perdiera por la línea lateral. Su marca, Alexis Valenzuela intentó disputar la pelota, pero lo empujó y el jujeño terminó dando la cabeza de lleno con el paredón de la tribuna.
Minutos más tarde, la ambulancia lo llevó hasta el hospital Lucio Meléndez de Adrogue, y posteriormente a Sanatorio Trinidad Mitre, de Balvanera. Estuvo internado durante 11 largos días, donde estuvo consiente, pero sin recordar lo que había sucedido.
Sus padres llegaron de la provincia y lo vieron estable. En la madrugada del 5 de mayo lo operaron para disminuir la presión intracraneal. Quedó en coma inducido y no se despertó jamás.
En dialogo con www.deBrown.com.ar, Gabriel Ostanelli, presidente de San Martín de Burzaco confirmó que se encuentra en Perico, Jujuy, la ciudad natal del jugador. “Estoy acompañando a su familia en el segundo aniversario”, remarcó y agregó: "Como ser humano y profesional era excelente. Desde el club estamos presentes año tras año, que es lo que se merecen", señaló.
Emanuel Ortega había llegado al “Azul”, a préstamo desde las inferiores del Club Atlético Banfield, en donde le veían futuro con la pelota y decidieron darle rodaje en la institución de Burzaco.
“Ema era un pibe muy humilde y respetuoso”, recordó “Chiqui” Ledesma en comunicación con este medio. David compartió plantel con el “Burrito” y lo describió como una excelente persona, que no hablaba mucho. “Todos los días entrenaba para mejor y llegar a lograr su sueño”, sostuvo.
“Tenía muchas ganas de crecer. Se hacía querer por lo buena persona que era. En esta fecha se te vienen miles de recuerdos vividos”, lamenta el delantero, hoy figura en el plantel dirigido por Diego Galeano.
El “Ruso” Scurnik, arquero y amigo del “Facha”, lo recuerda en todos los partidos ya que sale al campo de juego con una camiseta en su honor, con su fotografía. “Era apasionado por lo que hacía. Tenía mucho talento e iba a seguir creciendo y convertirse en un deportista de élite”, afirmó Federico a de Brown.
"Había mucha diferencia d edad y Ema hacía poquito que estaba. Se lo protegía mucho y se lo aconsejaba, aunque era un chico que tenía muy en claro lo que quería. Con la familia estamos siempre en contacto, quedó un vínculo muy lindo", resaltó el guardametas quien ayuda a los parientes de Ortega en lo que puede.
En la actualidad, por decisión de la AFA, todas las canchas del ascenso cuentan con una cobertura en todos los paredones que se encuentren cerca de los límites del campo de juego. En homenaje al jujeño, San Martín decidió rebautizar esa tribuna con el nombre de “Tierra Santa”, y en las afueras del estadio pintaron un mural.
“El fútbol es mi vida, no solo un pasatiempo, es lo que me hace olvidar de todo, y por el que daría la vida. El día que no pueda jugar más, ahí termina mi vida”.
Emanuel Ortega
