Desde su creación en 1993, el Sector Industrial Planificado se convirtió en uno de los polos más destacados en la Provincia por su contante crecimiento, que permite avances tecnológicos y, a su vez, trabajo para los vecinos del distrito. En la actualidad, más de 250 empresas están instaladas allí, en las cuales se desempeñan más de ocho mil empleados.
El Parque Industrial de Burzaco logró posicionarse en los últimos años como uno de los más importantes de la provincia de Buenos Aires. Por estos días, allí están instaladas 256 empresas -en su mayoría PYMES y también algunas multinacionales-, las cuales hacen un aporte importante al PBI bonaerense y son fuente de trabajo para muchos brownianos.
En diciembre, el Sector Industrial Planificado de Almirante Brown (SIPAB) cumplió 20 años desde su creación. Durante estas dos décadas fueron varios los cambios que allí se dieron, así también como un notable crecimiento.“Como todo proyecto, el día que se creó no se pensaba llegar tan lejos”, sostuvo el presidente de la Comisión Mixta, Walter Sipag.
Durante estos años, el Parque -que hoy emplea a más de ocho mil personas- tuvo un desarrollo constante que lo llevó a lograr un destacado acercamiento con la comunidad local, debido a las posibilidades laborales que ofrece. Además, a pesar de las variaciones que padeció, adquirió un gran protagonismo en el plano provincial y nacional, y también obtuvo proyección internacional.
Otro punto favorable que remarcan quienes analizan y evalúan el funcionamiento de este tipo de polos, es la ubicación geográfica que tiene el área industrial, que está situada en un predio de 550 hectáreas, ubicadas entre Luis María Drago, Carlos Viel y T. Guido. Se constituyó como “el parque PYME más grande del país” debido a la infraestructura y las instalaciones con las que cuenta, que son apropiadas para este tipo de empresas.
“Uno disfruta de entrar al Parque y ver como cambió. Acá se propugna el cuidado del medio ambiente, el trabajo dentro de las normas de trabajo. Se trabaja denodadamente por el cuidado de los bienes. Tenemos un sinnúmero de cosas que crecieron en el tiempo”, señaló uno de los titulares de la Comisión.
En sintonía con los cambios y crisis que se sucedieron en el país, el SIPAB no estuvo ajeno a ellos y también atravesó momentos difíciles desde el momento en que se creó. No obstante, como resultado del “trabajo en conjunto” entre el sector privado y el estatal, “nunca dejó de ser visto como un potencial económico” más allá de que en momentos como en 2001 haya vivido algún “parate momentáneo”.
“Puedo decir que cada uno de los que estuvimos en su momento, teníamos claro que el trabajo conjunto, el apoyo del Municipio iba a lograr que se constituyera un parque industrial y que a partir de ahí se iba a poder crecer con un ordenamiento territorial y una capacidad de la que no conocíamos el límite. Y el tiempo nos dio la razón”, recordó el subsecretario de Industria y Comercio del gobierno municipal y presidente de la Mesa Federal de Parques Industriales, Horacio Lamberti.
Con estos antecedentes positivos y de cara al futuro, la mirada está centrada en ampliar la apuesta y lograr que más firmas sean parque de este emprendimiento. “Tenemos diversidad de producciones que permite generar sinergia y creo que el paso siguiente es ordenar en el futuro las cadenas de valor a ver si somos capaces de atraer más industrias”, indicó el funcionario.
Expo Parque
Cada año, las empresas del sector realizan una exposición en la cual se proponen “mostrar y potenciar la importancia económica y productiva” del este polo industrial así como también consolidar “los vínculos entre las firmas” que lo construyen con las externas a él.
En el evento, que se desarrolla generalmente tres días, se llevan a cabo diversas actividades, charlas y debates con la presencia de autoridades provinciales, municipales y representantes de compañías de toda la región.
