Desde marzo, el ex púgil y actual entrenador José Niz aporta sus conocimientos y técnica en la Sociedad de Fomento del barrio. En dialogo con De Brown, explicó las sensaciones que genera trabajar con jóvenes y la importancia de este deporte como una herramienta de contención social.
Ubicado en la calle Dardo Rocha y Charcas, se encuentra la Sociedad de Fomento San Agustín en donde José Niz recibe a unas 20 personas por día de ambos sexos, que se acercan para practicar esta disciplina de manera recreativa y profesional.
Ligado al deporte de narices chatas desde su juventud, el entrenador supo brillar en la categoría Pluma, realizando muchas peleas en el campo amateur, pero sin llegar a debutar profesionalmente.
“El boxeo es parte de mi vida. Lo practiqué y ahora estoy involucrado desde otro lugar, formando nuevos valores. Hace cinco años que me dedico a ser técnico, pero desde hace uno que estoy en esta institución. Fue como empezar de nuevo, pero de a poco voy sumando nuevos alumnos”, expresó en dialogo con www.deBrown.com.ar.
Más allá de impartir sus conocimientos, Niz resalta la importancia del gimnasio como un pasatiempo sano, capaz de ayudar a jóvenes que escapan de adicciones y situación de calle.
“Yo no soy ingenuo y sé que todos los chicos no van a ser boxeadores. Pero he sido testigo de cómo la disciplina del entrenamiento y la pasión que generan los guantes, son un aliciente para ayudarlos a dejar atrás problemas de drogas y alcoholismo”, explicó.
Entre los pupilos que se acercan a adquirir sus facultades, el coach browniano resalta a Adrián Olivera que se encuentra a un paso de iniciar su camino en el campo rentado y Daniel Niz, su sobrino. Ambos púgiles pelean en 69 kilos (Superwelter).
Como formador de talentos, aspira a que alguno de sus dirigidos pueda quedar seleccionado en el equipo nacional. “Representar al país es una experiencia muy enriquecedora. No sólo te da prestigio y rodaje, sino también la posibilidad de viajar por el mundo y conocer otra gente”, señaló.
Siendo una actividad dura y sacrificada, es consciente de que son pocos los que alcanzan a destacarse. Por eso, busca brindarles herramientas que en el futuro puedan ser utilizadas dentro o fuera del ring.
Entre sus aspiraciones personales, sueña con poder sacar un campeón argentino. “Tengo buen material para alcanzar lo máximo. El camino es largo, pero con perseverancia, estoy convencido que vamos a llegar”, concluyó.