El ex púgil y actual entrenador Daniel Salguero hace cinco años continúa el proyecto de su abuelo, formando chicos en esta disciplina. En dialogo con De Brown, expresó sus expectativas y adelantó que uno de sus pupilos peleará por un título mundial.
Ubicado en Salaberry y Charcas, dentro del complejo habitacional de Claypole, Sergio Daniel Salguero recibe a unas 60 personas por día que se acercan a practicar esta actividad de manera recreativa y profesional.
Con más de 60 peleas en el plano amateur, el técnico supo destacarse en la categoría Ligero (60 kilos), donde tuvo la oportunidad de integrar la Selección Nacional Juvenil y recorrer los cuadriláteros del país.
“La escuela 'Horizonte' era un proyecto conjunto que tenía con mi abuelo, cuando falleció en el 2011, quedé al frente del gimnasio y me dediqué de lleno a la formación de jóvenes”, relató en dialogo con www.deBrown.com.ar.
Entre los numerosos chicos que se acercan día a día a entrenarse al establecimiento, quince compiten de manera regular y tres ya dejaron los cabezales de protección e iniciaron el largo y difícil camino del profesionalismo.
Entre ellos se encuentran: el ex Campeón Latino Leonardo Fernández, quién se desempeña normalmente en los 57 kilos (Superpluma); Gastón Cabrera (Ligero) y Eugenia López, quién ya disputó más de 15 peleas en Ligero.
Con respecto a Fernández, Salguero está a la espera de la confirmación para disputar el Título Mundial de la categoría en Estados Unidos. “Hace tiempo que venimos trabajando con Leo y la verdad es que anda muy bien. A través del apoderado de Juan Carlos Reveco (ex Campeón Mundial Mosca), se abrió esta posibilidad y no la queremos desaprovechar”, explicó.
Conocedor de lo difícil que es el ambiente de esta disciplina, Daniel aspira a poder continuar en la dirección técnica por mucho tiempo y sueña con poder seguir expandiendo sus conocimientos en otras partes del distrito.
“Estamos en tratativas para tener un espacio en la sede del club Claypole. Sería algo muy lindo, no sólo para mí, sino para todos los chicos que se quieran acercar a practicar uno de los deportes más completos y que además, está lleno de valores”, adelantó.
“El boxeo estuvo siempre vinculado a mi familia y pese a los numerosos obstáculos que hay que sortear, es mi pasión. Con 28 años, tengo un largo camino por recorrer, pero estoy dando los pasos necesarios para seguir creciendo y ganarme el reconocimiento de mis pares”, concluyó.