Así lo aseguró Joan Guerra en diálogo con De Brown, tras el triunfo del último fin de semana ante Paraguayo. El defensor analizó el presente del elenco sureño y se mostró confiado para lo que resta de campeonato. Claypole visitará el próximo martes a El Porvenir, en Gerli.
Tras un arranque esperanzador, en donde lideró la tabla de posiciones de Primera D por tres fechas, Claypole entró en una meseta en la que no sumó unidades y se alejó de los puestos de vanguardia. El triunfo ante Deportivo Paraguayo del último fin de semana, fue un bálsamo para los dirigidos por Diego Piñeiro que, además de volver a la victoria, se colocaron a dos unidades del líder, Liniers.
Uno de los abanderados de la levantada ante el conjunto “Guaraní” fue Joan Guerra, quién -luego de estar ausente dos fechas por una lesión-, volvió al primer equipo y tuvo su bautismo en la red. En diálogo con www.deBrown.com.ar, el delantero analizó su presente y el de su equipo.
“Teníamos la mente puesta en volver al triunfo y por suerte se nos dio. La victoria nos permite trabajar tranquilos durante la semana y preparar confiados el próximo compromiso frente a El Porvenir”, señaló el defensor “Tambero”.
Al analizar las claves de la victoria, Guerra aseguró: “Nosotros sabíamos que ellos manejan muy bien la pelota y por eso salimos a tratar de romper ese circuito. A esto le sumamos mucha presión, con la premisa de siempre tener diferencia numérica en todos los sectores de la cancha. Por suerte, lo pudimos conseguir y obtuvimos tres puntos muy importantes”.
Cuando el partido no tenía un dominador fijo, fue Guerra quién rompió la paridad para abrir el camino. “El juego estaba muy trabado en la mitad de la cancha y por eso Piñeiro nos pidió que probemos de afuera. Afortunadamente, sirvió para ganar que es algo que el grupo se merecía”, señaló a este medio.
Y agregó: “Fue muy especial convertir el gol, no sabía cómo festejarlo. Viví mucha ansiedad esas fechas que no pude estar por la lesión, el grupo fue muy importante en ese momento porque me contuvo y me ayudó a no bajar los brazos. Es por eso que quería festejarlo con todos ellos”.
El jugador surgido de la cantera “Tambera” valora la importancia del plantel que se formó y asegura que éste “es el momento de pegar el salto”, tanto para el club, como para los jugadores. Asimismo, resalta la calidad humana del cuerpo técnico y de sus compañeros.
Para finalizar, el marcador de punta no dudó en trazar los objetivos de su equipo para este año: “Este el año de Claypole, si seguimos con esta mentalidad, vamos a conseguir el ascenso. Es el sueño de todos, llegar a fin de año y poder compartir esa alegría con todo el pueblo Tambero”.