Se realizó la primera audiencia por el homicidio ocurrido en 2013 frente al bingo de Adrogué. Declararon casi todos los testigos de la querella. Mario Correa está acusado de "homicidio agravado" y "tentativa de homicidio". En diálogo con De Brown, la familia manifestó que solicitarán la "pena máxima" para el ex policía.
Foto: Archivo
Comenzó en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, el juicio por el crimen de Mauro Silva y el intento de asesinato de su hermano, Renzo Silva. El hecho ocurrió la noche del 2 de julio de 2013 en la puerta del bingo de Adrogué, cuando ambos jóvenes intentaron evitar una golpiza de un hombre a su pareja.
En la primera audiencia, que se llevó a cabo el pasado martes, declararon 10 de los 11 testigos que presentó la querella, donde expusieron cómo habían ocurrido los hechos. El testimonio más importante fue el de Renzo, quien presenció el crimen.
“El 28 es la próxima audiencia y el 6 de mayo son los alegatos. Nosotros estamos conformes con cómo se va desarrollando el juicio y esperamos encontrar justicia por Mauro”, explicó en diálogo con www.deBrown.com.ar el papá de la víctima y de su hermano herido, Jorge Silva.
Y agregó: "Pedimos la pena máxima, cadena perpetua para el hombre que nos arrebató la vida de nuestro hijo".
Mediante la reconstrucción oral que brindaron los testimonios, se pudo establecer que Corre cruzó la primera parte de la avenida Hipólito Yrigoyen con una bolsa en mano y con el semáforo a su favor. Se detuvo en el boulevard, sacó su pistola Versa Thunder calibre 9 milímetros y efectuó dos tandas de disparos. Mauro recibió dos impactos y murió; mientras que Renzo, quien trató de socorrer a su hermano, resultó herido de dos disparos en una de sus piernas.
Luego, según el relato de los testigos, Correa volvió a cruzar la calle, entró al Bingo y se presentó como “Mayor”. Aseguró que habían querido robarle y los policías del lugar reaccionaron en pos de ello, deteniendo a un transeúnte.
Inmediatamente, los testigos presenciales explicaron que era lo que había pasado. El aprehendido fue liberado rápidamente y a Correa lo trasladaron hasta la Comisaría de Adrogué.
“Falta un sólo testigo que nos interesa que declare, un policía. Mientras avance el juicio estamos bien, vamos a ver qué pasa cuando sean los alegatos, que son la parte más importante. Hasta ahora estamos más que conformes, con lo que se escuchó en los testimonios. Después hay que ver qué es lo que dicen los jueces", detalló el padre de los jóvenes.
Así, el enjuiciamiento a Correa seguirá el próximo martes 28 de este mes, en el TOC 3 de Lomas de Zamora. Tras eso, el 6 de mayo será el turno de los alegatos, y finalmente el veredicto.