Los gladiadores lucharon hasta el final, pero no alcanzó: cayeron por 19 a 12 ante Brasil y el título mayor fue para los cariocas. Pese a la derrota local, el sábado se vivió una auténtica jornada de fiesta en el Centro de Recreación y Deportes. El tercer lugar fue para Panamá.
Finalmente, el torneo disputado en Almirante Brown consagró campeón a Brasil en tres modalidades: 7 vs. 7 (masculino), 4 vs 4 B (masculino) y en el 7 vs. 7 femenino. Por su parte, la selección de nuestro país obtuvo el título en el 4 vs. 4 masculino A.
En la primera final del sábado, el 4 vs. 4 masculino A, Argentina superó a el seleccionado carioca por 2-0 en una definición cerrada hasta el cierre en ambos parciales. El primer set fue el emotivo, porque tuvo un muy buen ritmo intercambiando ataque por ataque y que además, se desarrolló con extrema paridad durante los diez minutos. El combinado nacional se lo terminó llevando por 5-4 con una muy buena actuación de Julio Fernández.
En el segundo set, el más físico y luchado de los dos, fue nuevamente la "Albiceleste" -ayer vestida de azul- quién consiguió una ventaja desde el comienzo y que luego pudo mantener sin mayores problemas jugando siempre con la desesperación brasilera. Varias expulsiones en la "Verdeamarela" sentenciaron la historia, y Argentina se lo terminó llevando por 4-2 obteniendo el primer título del día en juego.
La revancha llegó rápido para los muchachos del país vecino al consagrarse campeón del 4 vs. 4 masculino categoría B por 2-1. Tras un primer set parejo en el inicio (3-3), Brasil lo resolvió claridad por 7-3 luego de hilvanar un contundente parcial de 4-0. Los dirigidos por Fernando Mihovich y Gustavo Borro no bajaron los brazos.
En la definición de la modalidad 7 vs. 7 masculino, el clásico también quedó para Brasil. El comienzo del partido fue muy atractivo, con ambos equipos encontrando espacios para lanzar y manejando bien los espacios. Sin embargo, en el transcurrir de los minutos Argentina perdió frescura, a tal punto de que estuvo más de 10 minutos sin anotar. Es cierto que los albicelestes se enemistaron con el arco rival, pero fue espectacular el nivel que exhibió el arquero brasilero.
Fue notable la actitud del conjunto local, buscando achicar la brecha de manera incesante y por diferentes medios desde el punto de vista técnico y del desarrollo de las jugadas. Al finalizar el primer tiempo, el tablero indicaba un 10 a 7 en favor de Brasil.
En la segunda etapa los brasileños acentuaron su leve ventaja en base a un trabajo táctico exquisito, del cual participó incluso su golero, saliendo de abajo de los tres palos para cortinar y dejar solos a sus compañeros en la salida. A eso lo complementaron con un asombroso poder en los lanzamientos. La diferencia de efectividad se hizo cada vez más notoria. El resultado final fue 19 a 12. En la definición por el tercer puesto, Panamá le ganó a Bolivia 21-11 y completó el podio.
En el único encuentro de la jornada de la rama femenina, Brasil volvió a demostrar su superioridad sobre Chile en la final de la modalidad 7 vs. 7. Obtuvo una rápida ventaja con un parcial de 4-0 en el comienzo que supo mantener durante los cuarenta minutos restantes.
Las brasileñas se llevaron el primer tiempo 8 a 2 y el partido 15 a 7, demostrando que son el mejor equipo del continente. Hace casi diez años que vienen trabajando y esa es una clave de porqué hay gran diferencia sobre el resto.