El juvenil delantero marcó, en tiempo de descuento, el único tanto con el que Brown de Adrogué derrotó a Villa San Carlos. El equipo de Pablo Vico debió batallar más de la cuenta ante un duro rival que lo complicó y cerró sus caminos. El próximo compromiso será ante Tristán Suárez.
En un partido accidentado, el “Tricolor” obtuvo un importante triunfo que le permite continuar en lo más alto de la tabla de posiciones, cuando sólo quedan nueve puntos en disputa. En un encuentro correspondiente a la trigésima novena fecha del Torneo de Primera B Metropolitana, mostró entereza para sobreponerse a las incidencias del juego.
En el primer tiempo al conjunto browniano se lo notó nervioso. La exigencia de estar en la cima le creó una presión que se vio reflejada en la cancha. Con Adrián Maidana afuera por suspensión, faltó el referente en el mediocampo que le permita salir jugando con claridad.
Villa San Carlos plantó dos líneas de cuatro bien definidas y ordenadas que se limitaron a cortar las sociedades del local, para intentar salir rápido de contragolpe. Sin ataques elaborados, se presentó un trámite de fricción que facilitó el planteo de la escuadra visitante.
Pese a no estar fino, el líder del certamen fue el más ambicioso de los dos y tuvo su primera aproximación en los pies de Alejandro Quintana, pero el remate salió desviado. El pleito fue ganando en tensión y ambos clubes exigían una mayor participación del árbitro Pablo Giménez que no tuvo una buena tarde.
A los 30 minutos, tras una jugada dudosa, un jugador del “Villero” quedó en el piso y se suscitó un tumulto en donde abundaron empujones, manotazos y protestas de todo tipo. De manera salomónica, Giménez expulsó a Joel Barbosa y Matías Sproat del lado del “Tricolor”, y a Federico Slezack y Nahuel Figueredo del bando de Berisso.
Casi sin llegadas y con los arcos cerrados, se fueron al descanso con su formación seriamente resentida. Sin su jugador más creativo, el team de Adrogué llevó las de perder en las expulsiones, ya que los dirigidos por Osvaldo Ingrao en ningún momento vieron negativamente la igualdad.
Para el complemento, Vico dispuso el ingreso de Maximiliano Brito para ganar potencia y altura en la delantera. Con mucha entrega, sus dirigidos fueron los absolutos dominadores de la segunda mitad, pero sin contundencia en los últimos metros.
La lesión del defensor Guillermo Esteban terminó de decorar el cuadro, pero el “Bigotón”, en una decisión audaz, hizo ingresar al atacante Leandro Llodrá y jugó todas sus fichas para alzarse con la victoria.
El uruguayo Brito lo tuvo de cabeza en dos oportunidades, pero en ambos casos, la figura del arquero Gonzalo Paredes impidió el festejo. Cuando ya no quedaban casi minutos, tras un buen avance por la franja izquierda, Llodrá ingresó solo por el centro del área para anotar el único gol de la tarde.
Triunfo trabajado, agónico y vital para el conjunto browniano. Cuando no pudo desplegar su habitual juego, afloró el temperamento y la entrega para no dejar pasar otra oportunidad y seguir mirando a todos desde arriba.
El próximo fin de semana no habrá fútbol por las elecciones nacionales y recién volverá a la acción en quince días cuando visite a Tristán Suárez, en Ezeiza. Para ese compromiso, el técnico contará con la vuelta de Maidana y Guillermo Pfund, pero deberá decidir los reemplazos de Barbosa y Sproat.