YPF y Axion aumentaron 5%. Shell debió recalcular la suba que tenía prevista. Los incrementos son más altos de lo esperado como consecuencia de la devaluación del peso en las últimas semanas.
Que llenar el tanque sea cada vez más caro no es una novedad. Lo relevante es que el último fin de semana Shell había fijado su tercer ajuste en lo que va del año por encima de los esperado. Casi un 10 por ciento había sido la suba de su precios. Desde la compañía justificaron el incremento a raíz de la depreciación que sufrió el peso la semana pasada.
No obstante, la petrolera decidió dar marcha atrás con la medida porque el aumento en las otras compañías de combustibles la suba había sido mucho menor, cercana al 5%.
La empresa holandesa ,que en febrero y marzo subió sus precios 2,09% y 2,8% respectivamente, finalmente bajó el porcentaje de aumento "para mantener la competitividad frente a las otras compañías".
De esta forma, en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores, el litro de nafta Super quedó en 41,48 pesos; la nafta V-Power en $47,67; la V-Power diesel en $45,95; y la Diesel en $39,57.
La suba de la petrolera argentina fue del 4,7% en promedio. El litro de la Super e Infinia se incrementó un 4,55% mientras que Infinia Diesel y D500 lo hicieron en 4,89%.
La empresa del Grupo Bridas también subió al tren los aumentos. La suba fue entre 4,5 y 5,3 por ciento. A modo de referencia, el precio del litro de nafta Super en la ciudad de Buenos Aires será de 40,93 (+4,5%), el litro de nafta premium valdrá 47,45 (+5,2%), el diesel 500 costará 38,94 (+5,3%) y el Euro diesel, 45,20 (+4,8%).
