Tras conocerse la dura sanción de la FIFA para Luis Suárez, continuaron los partidos de la primera fase en Brasil 2014. Portugal venció a Ghana 2-1, pero la diferencia de gol no le alcanzó para superar en el grupo a Estadios Unidos y quedó fuera. Los "yankis" cayeron ante Alemania por 1 a 0; mientras que Argelia dio la sorpresa al igualar 1-1 con Rusia y meterse en octavos.
Los "Lusos" de Paulo Bento vencieron a Ghana por 2 a 1, pero quedaron eliminados al perder en diferencia de gol con el seleccionado de Estados Unidos.
Un excelente jugador en un equipo que no llegó a ser tal. Cristiano Ronaldo no llegó en las mejores condiciones físicas al Mundial por haber dejado todo en la temporada con su club, el Real Madrid. Pero el crack portugués, más allá de que su calidad sigue intacta a pesar de su merma, no pudo ni tuvo compañeros en los cuales apoyarse para pensar en grande. La consecuencia lógica fue esta eliminación en primera ronda.
Pese a que CR7, jugó un buen encuentro, parece que los arcos brasileños le resultaron más chicos que los europeos. Tuvo muchas chances que, entre el travesaño, el arquero Dauda o porque se fueron cerquita, no terminaron en gol. Recién a falta de nueve minutos, aprovechando un error del contrario, la mandó de zurda al fondo del arco para el 2-1. Demasiado poco para el conjunto portugués.
Por su parte, os africanos, que sufrieron un gol en contra de Boye y lograron la igualdad tras una buena jugada concretada por Asamoah Gyan, estuvieron más cerca del pase a octavos. No por juego o por situaciones, sino porque estuvieron varios minutos a un tanto de hacerlo: si ganaba 2-1, aprovechaba la caída de USA ante Alemania para sacarle el segundo puesto. Después del empate transitorio, Waris se lo perdió en el área chica. No pudo ser. Finalmente, por mejor diferencia de gol a favor, los estadounidenses se quedaron con el segundo lugar por encima de Portugal.
El partido entre Estados Unidos y Alemania se jugó bajo una fuerte lluvia en Recife. Los primeros minutos fueron de dominio absoluto de los europeos, que tuvieron la pelota y generaron las mejores aproximaciones.
Alemania tuvo la primera con Lukas Podolski al minuto de juego. Y a partir de ahí mismo se hizo el dominador de las acciones. Mucha posesión y claridad fueron las claves del equipo de Joachim Löw.
Recién en el minuto 21 se dio la primera chance de gol de EEUU. Fue por intermedio de un remate de larga distancia de Graham Zusi, que se fue arriba del travesaño. Eso fue lo único peligroso que generó el conjunto de Klinsmann en esa primera etapa.
Luego de los 20´ se hizo mucho más parejo el partido. Los norteamericanos respetaron menos a su rival y se animó a pelearle la posesión del balón pero sin llegar al área contraria. Tras los 30´, el cotejo entró en una meseta y ninguno de los dos se preocupó por generar peligro. Ambos sabían que el resultado les convenía.
Sin embargo, en el segundo tiempo, el desarrollo fue completamente distinto. Si alguno especulaba con un empate acordado, todas esas hipótesis quedaron a un lado porque los alemanes salieron con otra actitud y lograron convertir rápidamente por intermedio de Thomas Müller. Tras el tanto, los de Löw afianzaron su dominio y manejaron a gusto el partido.
A partir de allí se vio la mejor versión de los teutones y, en contrapartida, la peor de los estadounidenses. Con gran manejo de pelota, posesión y situaciones, los europeos demostraron por qué son candidatos a quedarse con el Mundial. Tuvieron otras oportunidades para marcar, pero dio la sensación que reguló fuerzas para lo que se viene. Ambos ya están pensando en los octavos de final.
Los argelinos casi que dieron la vuelta olímpica. No fueron campeones del mundo, pero haber conseguido el pasaje a octavos para ellos es prácticamente lo mismo. Gracias al empate que cosecharon contra Rusia en Curitiba lograron clasificarse a la segunda fase de una Copa del Mundo. Histórico.
Obligado, Rusia salió del vestuario con el cuchillo entre los dientes. Fue agresivo como nunca Se llevó puesto a Argelia, lo metió en un arco. Lo bombardeó. Hasta que lo lastimó: un cabezazo letal de Alexander Kokorin le dio el gol que le estaba dando la clasificación. Que no se la haya dado fue culpa de los propios rusos.
Argelia había quedado en jaque. Estaba golpeado anímica y futbolísticamente. No entendía cómo esa Rusia apática de los primeros dos partidos podía haber cambiado tanto. Había solamente un gol de diferencia, pero mucho trajín en el medio. Trajín que los rusos decidieron facilitarle cediéndole la pelota en una apuesta que resultó fatal: el contragolpe.
Pudo haberlo ganado, es cierto, pero pagó por mezquino. Porque metiéndose atrás resucitó a los africanos, quienes estaban listos para volver a casa. Le dio vida, lo dejó crecer y lo terminó padeciendo. El empate llegó a raíz de una mala salida de Akinfeev, arquero ruso, que calculó mal y le dejó el gol servido a Slimani, héroe de esta histórica clasificación argelina.
El italiano Fabio Capello, técnico mejor pago en este Mundial, se fue de la competencia antes de lo previsto: los millones que le pusieron no alcanzaron para que Rusia se meta en octavos pese a que en la previa era uno de los candidatos del Grupo H junto a Bélgica, que si se clasifico.
Ahora, en en la próxima fase, espera Alemania. Una Alemania de la que Argelia no tiene un buen recuerdo: en el Mundial de España 82 lo dejó afuera arreglando el partido con Austria, en un burdo acuerdo que el defensor alemán Hans Peter Briegel terminó reconociendo años después. Será tiempo de revancha.
A la talentosa y joven generación de Bélgica le alcanzaba con un punto para cerrar el Grupo H como líder, pero no conforme con eso, venció 1-0 a Corea del Sur para terminar la primera ronda con tres triunfos en la misma cantidad de juegos.
La selección belga, que saltó al campo sin su máxima estrella Eden Hazard, protegida para jugar en plenitud la segunda ronda, se quedó con un futbolista menos por la clara expulsión de Steven Defour en el minuto 45, en una patada criminal de clara mala intención.
En el complemento, Corea buscó con mayor énfasis el arco rival, pero sus limitaciones ofensivas no le permitieron sacar ventajas ante la seguridad de Thibaut Courtois.
En el minuto 78, Jan Vertonghen capturó un rebote del portero Seung-Gyu Kim y convirtió el único gol del partido para acabar con el sueño surcoreano de llegar a la segunda ronda en el Arena Corinthians de San Pablo.
La selección dirigida por el legendario internacional belga Marc Wilmots logró evitar en los octavos de final a Alemania, la mejor posicionada del Grupo G, y se medirá con Estados Unidos en busca de los cuartos de final, el próximo martes en Salvador.
Bélgica, Holanda, Argentina y Colombia fueron las cuatro selecciones que alcanzaron los octavos de final con un pleno de victorias. Aunque los "Diablos Rojos" no llegaron a brillar en ninguno de sus tres juegos, pudieron cumplir con las expectativas previas al menos en cuanto a resultados.