Las sesenta cámaras de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA) solicitarán a la Justicia un freno a los excesivos aumentos de gas en industrias y comercios. Se debe a que no fueron contemplados en el fallo de la Corte Suprema.
Ante la decisión del máximo tribunal de retrotraer el cuadro tarifario al momento previo de las subas sólo para usuarios residenciales, las pequeñas y medianas empresas solicitan los incrementos se detengan también en su sector.
"Las cámaras no queremos judicializar estas cuestiones, pero es el camino que nos dejó la falta de diálogo", aclaró el presidente de la confederación, Marcelo Fernández. A su vez, indicó que las industrias necesitan "previsibilidad y certidumbre para poder sostener el empleo y la producción".
Llevaron a cabo una reunión extraordinaria en la sede de CGERA. Participó un equipo de abogados encabezados por el ex presidente de la Asociación de Abogados de Buenos Aires y profesor de la UBA, Carlos Cruz; y los letrados Fernando Muriel y Florencia Sinagra, especialistas en amparos y derechos del consumidor.
Durante el encuentro, se establecieron las directrices del documento que elevarán en los próximos días ante la Justicia. Aseguraron que "la presentación multitudinaria no invalidara a los reclamos individuales".
"Estamos viviendo una situación muy complicada con caída de las ventas, aumento en las importaciones y ahora se suma la falta de certezas en las tarifas", señaló Fernandez.
La agrupación representa a sectores de manufacturas del cuero, indumentaria, curtiembres, exportadores pymes de la carne, electrónicos, radiodifusores, ópticos, engordadores de hacienda, fabricantes de tintas gráficas, metalúrgicos, insumos textiles, del juguete, industria del calzado y herrajes.
Asimismo, se encuentran reflejados los productores artísticos y culturales, seguridad, construcción, empresas procesadoras avícolas, laboratorios, farmacias, textiles, autopartes pyme, panaderil, ferroviarios, aires acondicionados, entre otros.