Todas las líneas de colectivos comenzaron nuevamente a prestar servicio desde las 15. La medida de fuerza había sido por el despido de uno de los chóferes. Habría sido reincorporado.
Miles de usuarios, gran parte de ellos de Almirante Brown, amanecieron con la noticia de la que los trabajadores de la empresa San Vicente estaban de paro. Finalmente, alrededor de las 15, levantaron la medida de fuerza.
El cese de actividades fue en solidaridad de Ariel Bermúdez. Se trata de un conductor de la línea 51. Según contó, tras trabajar 15 años en la compañía, había sido separado de su puesto hacía tres meses.
Como forma de reclamo, Bermúdez decidió encadenarse en la terminal de colectivos, ubicada en Burzaco. Mientras tanto, parte sus compañeros impidieron la salida de las unidades. Esto hizo que el servicio funcionará de manera "reducida".
Finalmente, habrían llegado a un acuerdo y el chófer habría sido reincorporado a su puesto. La medida de fuerza afectaba a las líneas 51, 74, 79, 370, 385, 388, 435 y 503. Desde la empresa, informaron que ya restablecieron su cronograma habitual.
No es la primera vez que los trabajadores de la empresa llevan adelante una medida como ésta para hacer escuchar sus voces. Varias de sus líneas realizaron sorpresivamente un paro hace dos semanas, tras un colectivero de la línea 177 resultar herido.
El trabajador fue atacado por tres hombres que le cortaron un dedo. Ocurrió por la madrugada cuando salía de la terminal para realizar su recorrido habitual.