En dos encuentros anotó tres tantos y se transformó en el caballito de batalla de Claypole. En dialogo con De Brown, el delantero aseguró que su buen presente en la red es una consecuencia del juego en equipo. El próximo domingo el "Tambero" recibirá a Muñíz.
Proveniente de Centro Español, Sebastián Milano llegó a principio de año para reforzar la escuadra “Tambera” y cumplió con creces ya que, en dos encuentros disputados anotó tres goles y se transformó en uno de los goleadores del certamen.
En dialogo con www.deBrown.com.ar, el delantero analizó el triunfo frente a Argentino de Rosario el último fin de semana: “Fue un partido trabado y duro. El 'Salaíto' practica buen fútbol y circula bien la pelota. Nosotros nos cerramos bien atrás y tuvimos la claridad para golpear en los momentos justos”.
Al referirse a su buen presente en la red, Milano afirmó: “Estoy contento porque los goles siempre te dan confianza pero, la realidad es que las conversiones son una consecuencia del rendimiento del equipo”.
Asimismo, el delantero se mostró “satisfecho” por el buen arranque y por la manera en que viene jugando Claypole. Sabiendo de la importancia que tiene comenzar un torneo con triunfos, el delantero aseguró que el techo está lejos, ya que “el equipo crece en cada partido”.
Ante la consulta de este medio por los problemas institucionales que vive el club del sur, y que lo llevaron a la incertidumbre de no saber si podría debutar, el goleador expresó: “Nosotros tratamos de abstraernos de los problemas extra futbolísticos. Formamos un grupo muy unido y fuerte, que nos ayuda a concentrarnos solamente en el juego”.
“No fue un momento grato. Se hablaba de desafiliación y era algo duro porque estaba en juego la temporada de todos. Por suerte se solucionó rápido y lo que rescato es que en ningún momento alteró el rendimiento del equipo”, agregó.
La próxima fecha el conjunto dirigido por Diego Piñeiro se medirá con su par de Muñíz en cancha de Lugano. Sin poder oficiar de local en el Rodolfo Capocasa, Milano le resta importancia y mira para adelante: “Nos encantaría jugar de local en nuestra cancha, pero la realidad es que no se puede. No hay que poner excusas y hay que saltar al campo de juego con la misma ambición de ganar que demostramos en estos primeros dos partidos”.
