En la Argentina, como en el resto de los países de la Región, una cuarta parte de los ciudadanos presentan sobrepeso y obesidad. Frente a esta situación, especialistas aconsejan consumir alimentos variados y realizar ejercicio físico, para reducir las consecuencias a futuro que acarrean estas patologías.
Anualmente,muerenpor lo menos 2,8 millones de pacientes por obesidaden el mundo, según un reciente relevamiento de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Mientas que, en América Latina, 130 millones sufren este mal.
Ante este lamentable panorama, desde la Organización Panamericana de la Salud elaboraron una guía práctica para evitar el desarrollo del padecimiento. En primer lugar, hay que controlar las porciones de alimentos que componen nuestra dieta. Por ejemplo, utilizar un plato de 30 a 25 centímetros implicará que se consuma un 22 por ciento menos de calorías.
En segundo, hay que tener plena conciencia de los ingredientes que se incorporan en la comida, por eso es prioritario cocinar y no comprar comida ya elaborada. También es importante acompañar una alimentación variada con ejercicio físico.
Otro aspecto a destacar es que quienes no logren optimizar su calidad de vida solos, deben contar con el apoyo de un profesional. Es que para adelgazar se requiere motivación.
Por otro lado, en el informe de la OPS se hace referencia a la situación de las embarazadas. El propósito es derribar el famoso mito de que se debe “comer por dos” durante este periodo. Por el contrario, si esto ocurre se podría ver afectada la salud tanto del bebe como de su madre.
¿Cuáles son las causas de desarrollo de la enfermedad?
- Desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas.
- Aumento en la ingesta de alimentos hipercalóricos, los cuales contienen exceso de grasa, sal y azúcares.
- No consumo de comestibles ricos en vitaminas, minerales y otros nutrientes.
- Descenso en la actividad física, promovido por la vida sedentaria que estimulan muchas formas de trabajo, los nuevos modos de desplazamiento y la creciente urbanización.
Con respecto a las consecuencias para el organismo de este tipo de prácticas alimenticias, se detallan: problemas cardiovasculares, como cardiopatía y accidente cerebrovascular, diabetes; trastornos del aparato locomotor, como la osteoartritis y, algunos cánceres, en especial del endometrio, mama y el de colon.
Esta dolencia, que no es trasmisible, afecta a personas mayores como a niños por igual. En el caso de los chicos, la obesidad se asocia con más frecuencia a las cifras de muerte prematura y discapacidad en la edad adulta. En ellos genera: dificultad respiratoria, cardiovascular, mayor riesgo de fracturas e hipertensión, resistencia a la insulina y consecuencias psicológicas.
Estadísticas
Teniendo en cuenta datos difundidos por la OMS desde 1980, la obesidad se duplicó en todo el mundo. En 2014, más de 1900 millones de personas, mayores de 18 años sufrían sobrepeso, y de ellos 600 millones eran obesos.
En 2013, más de 42 millones de niños menores de cinco años tenían exceso de peso. Y, en la actualidad los fallecimientos por esta causa superan a los producidos por la desnutrición, presente en muchos países subdesarrollados.
