Ya causó la muerte de cuatro niños en el país. Los profesionales médicos explicaron que no se trata de una epidemia, aunque advirtieron que "hay que estar atentos a los primeros síntomas".
El nombre de la bacteria Streptococcus pyogenes comenzó a resonar fuertemente en los últimos días. Provocó la muerte de cuatro niños y, además, dos pequeños se encuentran en grave estado en CABA. ¿Pero de qué se trata esta afección?
Es uno de los gérmenes más comunes, que afecta a la garganta y la piel. Suele causar faringitis y lesiones en la piel o escarlatina. Tratadas a tiempo, el paciente no suele presentar complicaciones.
Sin embargo, el problema comienza cuando la bacteria ingresa en la sangre del paciente y libera toxinas, un hecho que es poco frecuente y que hace que se vean afectados varios órganos. Esto la convierte en "invasiva". En esta etapa, hay una tasa de mortalidad de entre 20% y el 30%. La detección precoz es fundamental.
Los padres deben estar atentos a dos cuadros. En la fase común, el paciente puede tener dolor de garganta, placas, fiebre alta y dificultad para tragar. También pueden presentar lesiones en la piel. Hay que estar alerta sobre todo cuando estas pican o duelen.
Asimismo es preciso consultar a los médicos cuando el pequeño tiene palpitaciones y cambia su color; está decaído o tiene problema para respirar.
“Esta bacteria tratada precozmente con un antibiótico con una penicilina evoluciona es la forma perfecta y la mortalidad es bajísima”, señaló el jefe de infectología del hospital Gutiérrez, Eduardo López, en diálogo con los medios.
Esta enfermedad suele ser frecuente en pequeños de entre 1 y 6 años. Sin embargo, los casos pueden presentarse también en bebés de poco meses hasta adolescentes de 15. Asimismo, puede contraerla un adulto, aunque es poco común.
La bacteria suele circular por fines del invierno y en la primavera. Se contagia por contacto directo con secreciones nasales o de la garganta de las personas infectadas. También cuando el enfermo se rasca las lesiones, ya que lleva la bacteria con ellos y puede trasmitírsela a otros.
Hay tres grupos de personas que tiene más riesgo de sufrir esta enfermedad invasiva.
Hacer que los niños se laven las manos con frecuencia, sobre todo antes y después de comer. Asimismo, ante la aparición de cualquiera de los síntomas, consultar rápidamente con los médicos.
Por ahora se detectaron seis casos graves. De ellos, cuatro niños fallecieron. Dos tenían seis años y eran de Posadas y Rosario; mientras que el resto era de CABA. Asimismo, dos pequeños continúan internados en el hospital Elizalde, de la Ciudad.
Lo extraño de este panorama es que las enfermedades se desarrollaron en pacientes pediátricos sin vínculo entre sí y en un corto tiempo. Sin embargo, López señaló: “Estos casos son excepcionales”. "No hay un brote o epidemia y no hay vacuna que lo prevenga", explicó.