Ya realizaron alrededor de 300. Fueron donados al UPA de dicha localidad. Conocé esta historia.
Las distancias pueden, paradójicamente, unirnos más. Esto fue lo que pasó con un barrio de Longchamps. Pese a que cada vecino debía permanecer en su hogar a raíz del aislamiento obligatorio, crearon una cadena de producción de barbijos, elementos esenciales para los centros de salud.
La iniciativa surgió de un grupo de WhatsApp, que había sido creado para que los habitantes pudieran informar sobre los cortes de la zona y hechos de inseguridad. Terminó transformándose en el medio de comunicación primordial para llevar adelante esta acción solidaria.
“Se pidió quién tenía friselina, elástico y una máquina de coser y empezamos así a hacer una producción comunitaria”, contó Ana Cuccia, en diálogo con www.deBrown.com.ar. Así, tras consultarlo con una enfermera y mirar un tutorial de YouTube, dieron inicio a la confección de los barbijos.
Este proyecto representó todo un desafío. Requirió de una ardua organización para lograr transportar los materiales de casa en casa. De hecho, para ello aprovechan el momento en que van a hacer las compras para dejar los insumos en sus respectivos destinos.
“Tenemos chicas que cortan y arman y otras que cosen. Los más jóvenes, que van a hacer los mandados, llevan de un lado a otro las cosas para coser y cortar. Cuando llegan ya armados, yo los esterilizo dentro de mis posibilidades”, explicó.
Además, los brownianos toman los recaudos necesarios para mantener todo higienizado en medio de la expansión del Coronavirus. “Todo es recibido en el jardín y tenemos el Lysoform a mano y, antes de entrarlo, limpiamos la bolsa en un balde con lavandina”, detalló.
Ya realizaron alrededor de 300 barbijos que fueron donados al UPA de Longchamps. Fue así como las caras de los profesionales se vistieron en los últimos días de divertidos colores y dibujos. “Están todos re contentos, agradecidos. No lo esperaban. Estamos todas lloriqueando cada vez que recibos un agradecimiento”, contó.
La propuesta sirvió para unir a la comunidad. “El grupo de Whats App está formado como por 70 personas y hay vecinos que no nos conocemos las caras. Si nos cruzamos por la calle no sabemos quienes son y están participando”, resaltó.
El barrio se encuentra ubicado cerca de La Serenísima, a la altura del centro de jubilados “Cruz del Sur”. Quienes sean de la zona y quieran donar, pueden coordinar con Ana al 11 6365-0055.
Mónica fue quien propuso la idea. Viviana, Gladis, Lucia, Dora, Mariel, Cristina, Anabela, Mari, Susana y Sonia se encargan de cortar, armar y/o coser. Ana esteriliza los barbijos ya terminados. Mariana y Santiago se encargan de ir repartiendo los materiales en todo el barrio. Por último, Marina, Carolina, Silvina y Juliana, junto a muchos otros vecinos pusieron, su granito de arena donando insumos.