Lo informó el Indec. Las mayores subas se dieron en los servicios, debido al ajuste de tarifas. El golpe al bolsillo lo dio el aumento del transporte. Además, los precios mayoristas subieron un 4,6%. Se prevé que marzo marque un récord de suba porcentual.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) confirmó una inflación de 1,8% en enero. Los aumentos en alimentos, tarifas y combustibles empujaron el Índice de Precios al Consumidor hasta el techo de las estimaciones privadas, que oscilaban entre 1,7% y 1,8%.
La inflación total se mantiene en 25% en la comparación interanual, unas décimas encima de lo que acumuló en todo 2017.
La inflación denominada núcleo fue de 1,5% en enero contra diciembre. Trepó 21,1% en 12 meses. Se mantiene elevada la cifra en función del objetivo del Gobierno nacional de no superar el 15% de inflación este año.
Los precios de los bienes subieron menos que los de los servicios, debido a los nuevos cuadros tarifarios aplicados desde el primer día del mes. Los primeros registraron un 1,6% de aumento y los servicios crecieron 2,1%.
La apuesta oficial es que los mayores aumentos de tarifas se concentren en el primer trimestre y que la inflación de este período no supere el 5%. Se prevé que marco marque un récord, a raíz de incorporar todos los aumentos de este primer periodo del año.
Trascendió ayer que las distribuidoras de gas prevén pedir el visto bueno del Gobierno para aplicar otro aumento de hasta 43% en abril. Y aún restan nuevas subas en electricidad y transporte. Los combustibles, además, seguirán elevando el precio.
También subieron más que lo esperado. Según el Índice de Precios Mayoristas (IPIM) de enero se registró una variación de 4,6% contra diciembre. Los precios de los productos nacionales subieron 4,4% y los de los importados un 7,1%. Según advierten los analistas, esto se trasladará próximamente al mercado minorista.